Sus caricaturas publicadas en el Star and Stripes, diario militar, le abrieron las puertas en el Pesmen-Robin Commercial Art Studio, como aprendiz. Estaría haciendo dibujos para ser cortados, y armando ilustraciones para publicidad, programas de teatro y catálogos de ventas.
La percepción selectiva, tenía que unirlo en este sitio y no en otro, con el genio propulsor para el lanzamiento de su poder creativo: Ubber Ert Ikkwers.
Convencido de que las grandes dotes de Ubber Ert para dibujar serían el gran complemento para las historietas mentales que se le ocurrían, tan pronto lo conoció le propuso dos cosas: que unieran sus talentos y simplificara su nombre. Enseñarle el título de su primer startup: Ikwers-Disney Artistas Comerciales, fue suficiente para convencerlo a que unieran esfuerzos y talentos, y aceptara llamarse Ub. Ver su apellido encabezando el negocio le dio toda la confianza para dedicarle el mayor esfuerzo a esa aventura. La realidad era, que, para Walt, sonoramente, con el Disney primero, daría la impresión de ser una compañía óptica: ‘Disney Eye Works’.
Startup es todo nuevo emprendimiento capaz de enriquecer las raices del sistema económico, siendo sostenible y con la potencial posibilidad de generar empleo, en un corto tiempo, basado en los grados de calidad e innovación producidos. Es una prueba en permanente mejora.