Saludos Amigos.

Se escucha tanto del tema de los startups que pareciera tratarse, solamente, de tecnologías. La verdad es que todo nuevo emprendimiento capaz de enriquecer las raíces del tronco económico, siendo sostenible y con la potencial posibilidad de generar empleo, es una empresa emergente. En especial si basa su desarrollo en la calidad, creatividad e innovación.

 

A Ub, como primer socio, Walt le notó sus falencias como vendedor, por tal razón, buscó donde los Cauger a otro aprendíz de animación al que convenció de ser su nuevo socio, Fred Harman. Sin demora alguna, fundó KayCee Studio, startup tomado como un nuevo experimento que lo aproximara a mejorar, tanto el proceso, como la Visión, y así marcar un nuevo derrotero: producir cortos publicitarios animados usando tinta sobre celdas de celuloide. Como Ub se mostraba reticente debido al temor de no salir avante y exponer a su madre —que dependía totalmente de él— Walt, meses atrás y en silencio, había logrado que Milton Field —dueño de tres teatros en la ciudad— expusiera sus cortos, basados en los trabajos elaborados con Ub.

 

La inmediata aceptación del público, hizo que Field les pidiera ampliar su producción a entregas de un corto semanal. Estos consistieron en historietas cómicas sobre los procedimientos policiales, el estado de las calles, y los problemas locales más reconocidos, influenciado por las ideas socialistas del cinco veces candidato a la presidencia Eugene Victor Debs (1855-1926). Para cumplir, Walt reclutaba adolescentes, que, sin paga, seguían sus instrucciones a cambio de que les enseñara caricaturizar y animar, como les había sido prometido. Entre los enganchados figuraban Rudy Ising y Hughes Harman, hermano menor de Fred, quienes con el tiempo hicieron parte de la industria de cortos animados de manera independiente. Field optó por llamar estos nuevos cortos, the Newman Laugh O Gram, constituyendo esa nueva empresa para tal fin, siendo este el detonante para que Walt buscara inversionistas que también dieran vida a sus estudios: The Laugh-O-Gram Film.

 

Al no contar en un principio con los equipos adecuados, la cámara stop-motion era sacada por las noches de la Kansas Film a escondidas, y en la mañana se turnaban con Fred para devolverla con sigilo. Meses después, cuando Walt la pidió prestada a Vern Cauger, éste ya presentía que el joven sería un nuevo competidor, pues, sin saberlo, ya le trabajaba a cortos basados en los cuentos de hadas para la Newman. Y, como era de esperarse, finalmente, resultó Milton Field el comprador de los 300 pies grabados que satirizaban el trabajo de los funcionarios del ferrocarril, debido al pésimo mantenimiento de las vías en Kansas. Venta hecha al mismo precio que todos los anteriores cortos: 30 centavos el pié de filmación.

 

Así, le ha llegado el momento a Walt para retirarse de la Kansas City Film Ad, hacer uso de los 15 mil dólares vendidos a los accionistas, y a la semana siguiente, el 18 de mayo de hace 101 años, Walt, a sus 20, incorpora y registra su tercer emprendimiento: The Laugh-O-Gram Film, Inc.

 

Los invito a ver los pocos cortos que se conservan, visitando The Newman Laugh-O-Gram en YouTube.

CONTINUARA…